Las mejoras logísticas de almacén se vinculan a ciertos factores que deben impulsar las empresas para potenciar todo el proceso que está relacionado a esta área como por ejemplo ahorrar tiempo para aumentar la productividad y la eficiencia. Pero, ¿cómo lograrlo? En el artículo de hoy, desde Embaling, expertos en materiales de relleno y protección para envíos, queremos compartir una serie de mejoras logísticas de almacén para que su empresa alcance los máximos beneficios y mejore su rendimiento, apostando por una gestión óptima de la cadena de suministro.

10 consejos clave para mejorar la logística de tu almacén

Contar con mejoras logísticas en el almacén de una empresa, permite alcanzar la eficiencia y agilidad que hoy en día el mercado y los consumidores demandan. 

En tiempos de crecimiento exponencial de ventas a través de internet y, consecuentemente, de un aumento importante de los pedidos a enviar, gestionar adecuadamente el área de logística permite maximizar la rentabilidad de una organización mediante el aumento sostenido de las ventas.

Lo cuál significa que, a través de ciertas mejoras logísticas en un almacén, se alcanzan beneficios clave como el correcto seguimiento de los paquetes enviados hasta su entrega final, la optimización de los procesos desarrollados en el espacio como son el control de stock, el control del espacio o la mecanización del embalaje, entre otras ventajas.

Antes de mencionar los puntos clave para mejorar la logística de un almacén, se deben contemplar 3 puntos importantes:

1. La organización dentro de un espacio logístico es la palabra clave más relevante que han de tener en cuenta los encargados del área ya que un almacén bien estructurado ahorrará tiempo e impulsará la eficiencia deseada.
2. La seguridad dentro del almacén también debe ser prioritaria para brindar un espacio de protección a los empleados y operarios que desarrollan sus tareas.
3. La tecnología se ha convertido en un activo fundamental para las empresas modernas, por ello mantener una permanente actualización de equipo y maquinaria debe ser una norma para poder alcanzar los objetivos del negocio.

Ahora sí, veamos las 10 mejoras logísticas en almacén que debe tener en cuenta su empresa para una gestión inteligente y rentable de esta área sumamente importante.

Estrategia logística

El primer paso para mejorar la logística consiste en comenzar desde cero, es decir, diagramar una estrategia de acuerdo a las necesidades específicas del almacén. 

Para ello se deben identificar las principales necesidades y, principalmente, evaluar la cantidad de pedidos que se realizan a fin de establecer un criterio de peso para dicha estrategia. Un almacén que debe transportar 30 pedidos diarios no tendrá los mismos requisitos que una empresa que tiene más de 1000 pedidos.

Podemos unificar los siguientes criterios generales (aunque no son exclusivos) a la hora de diagramar la estrategia logística:

• Para 50 pedidos diarios, basta con 500 m2 de espacio y un equipo de al menos 5 personas.
• Para alcanzar una logística más estructurada, donde se produzcan más de 50 pedidos al día, la rigurosidad debe ser la base de todos los procesos: asignar tareas específicas, optar por automatización de procesos, instalar softwares de gestión, etcétera. 
• Para externalizar la logística del almacén se recomienda llevar una documentación detallada del stock y de los procesos de ingreso y salida a destino de las cargas para hacer frente a las demandas.

Mejora del espacio de trabajo

Para alcanzar este punto se pueden minimizar los desplazamientos innecesarios y optar por un picking más eficiente, lo cual optimiza la distribución de las mercancías en los diferentes estantes del almacén.

También se puede invertir en maquinaria que eviten riesgos laborales y sean más precisas al momento de movilizar cargas como en el caso de carretillas o transpaletas. Además también es importante contar con máquinas que se encarguen de garantizar un embalaje óptimo como es el caso de las flejadoras.

Optar por un equipamiento de calidad mejora el entorno laboral: pantallas informativas, lectores de código de barra, entre otros aparatos permiten agilizar y simplificar gran parte de las actividades desarrolladas por los miembros del equipo y reducirá la tasa de errores logísticos.

Estructura y orden del almacén

Hemos dicho que la organización lo es todo al momento de pensar en mejoras logísticas de un almacén y esto implica hacer un buen uso de las dimensiones del lugar, estructurando muy bien las zonas ya que esto agiliza los procesos y, por consiguiente, aumenta la eficiencia en toda la cadena de suministro.

Para lograrlo se pueden enumerar los productos y diagramar rutas logísticas para hallarlos rápidamente, delimitar zonas de trabajo específicas como el sobrestock o picking, etcétera.

Especialización de cada actividad 

Profesionalizar un almacén aumenta la precisión de las tareas a realizar por los equipos de trabajo y, para ello, es vital que cada empleado tenga una especialización en el almacén. 

En este sentido se vuelve esencial distribuir tareas para que cada trabajador se aboque a ellas de manera completa y sin distracciones.

Fijar un área de stocks de alta rotación

Sabemos que en todo almacén existen mercancías con una alta rotación ya que suelen ser las más solicitadas por los clientes y, por consiguiente, las más movilizadas y manipuladas por los trabajadores. 

Para que la tarea de stock de productos, envío, embalaje y salida sea veloz, dinámica y profesional será imprescindible crear una zona específica para almacenar estos productos. Lo recomendable es que se encuentre cerca del espacio de entrada, embalaje y zona de traslado. 

Organización de la mercancía en base a su clase logística

Clasificar los productos de acuerdo a sus especificidades ayuda a gestionar y administrar adecuadamente el espacio de almacenamiento. Una forma eficaz de clasificarlos es en productos voluminosos, productos personalizables, productos frescos, etcétera.

Implementar la técnica de cross-docking

La finalidad de la técnica de cross-docking es disminuir sustancialmente la permanencia de un producto en las instalaciones de la empresa, en nuestro caso en el sector de almacenamiento. 

A través de esta metodología, las mercancías no acaban en el almacén sino que pasan directamente al transporte de carga para evitar la pérdida de valor de un producto y disminuir las malas manipulaciones, robos o roturas. 

Claramente para llevar adelante esta técnica será necesario planificar previamente una buena estrategia logística.

Optimizar la preparación de productos similares

Para ahorrar costes y tiempos, muchas empresas líderes suelen centrarse en la optimización de la preparación de productos iguales o enviar juntas aquellas mercancías cuyas distancias geográficas son mínimas. Esto evita grandes pérdidas económicas en transporte que impactan fuertemente en la empresa. 

Automatizar la gestión de imperfecciones o devoluciones

Una de las mejoras logísticas de almacén más importantes es la buena gestión de aquellos productos en stock que han sufrido un desperfecto y aquellos que fueron devueltos por los compradores.

Para evitar interrupciones en la cadena de suministro e insatisfacciones, una alternativa eficaz es la implementación de procedimientos automatizados en las áreas de servicios de atención al cliente y de venta.

Control de calidad permanente

El desafío de la gestión de almacenes sigue siendo evitar la mayor cantidad de errores que retrasen la cadena de suministro. El control de calidad se encarga de la revisión constante de todos los pasos desarrollados en el proceso logístico: llegada del producto, picking, embalaje y traslado.

Este es el inicio al camino de la mejora continua en la logística de tu almacén. En Embaling contamos con las soluciones en embalaje que lo ayudan a alcanzar esta meta. ¡Descúbralas!